Nos enfrentamos a un nuevo año, cargados de expectativas, pero mas que esto debemos de tener presente las lecciones aprendidas, las cuales nos ayudaron a cambiar de alguna manera, el vivir en la incertidumbre colectiva que nos genero demasiada presión y expectativas. Pero entre todo este panorama de confusión debimos haber aprendido a apreciar cada día y cada minuto compartido con nuestros seres queridos.
Un nuevo año comienza y debemos mirar hacia atrás para corregir aquellos errores cometidos y poner en acción lo aprendido en las experiencias y circunstancias que vivimos en el 2022. Tener tiempo para reflexionar ayuda a mantener un estado de continua paz y a establecer una relación mas íntima con nuestro creador.
No espere al fin del mes o del año, cree una rutina donde la reflexión sea tan importante en tu vida como el alimento; los momentos de silencio son la recarga para el espíritu, el alma y el cuerpo, PERO en esos momentos de reflexión y silencio Dios debe ser el centro de tu encuentro. Como en otras ocasiones te invitamos a leer esta edición, comienza el año tomando sabias decisiones.
Feliz y bendecido 2023.
Te dejo con esta palabra : “Esperanza”
