Autismo es el trastorno del espectro autista (TEA) es un trastorno del desarrollo que afecta la comunicación y el comportamiento, y sus signos suelen aparecer en la primera infancia, incluso a partir del primer o segundo año de vida.
Los síntomas del TEA pueden variar, pero algunos de los más comunes en niños incluyen:
- Dificultades en la interacción social: Falta de contacto visual, dificultad para interpretar expresiones faciales y señales sociales, y falta de disfrute en actividades que otros señalan.
- Comportamientos repetitivos y restrictivos: Esto puede manifestarse como movimientos estereotípicos (balanceo, aleteo de manos, caminar de puntillas), repetición de palabras o frases, y el girar o alinear objetos.
- Problemas sensoriales: Sensibilidad a sonidos fuertes o luces brillantes.
- Otros comportamientos: Ser muy selectivo con la comida (comer quisquilloso), tener intereses muy intensos y enfocados en un solo tema, y ser auto-lesivo.
Prevalencia y Demografía
Las tasas de autismo 📈 están en aumento, con 1 de cada 36 niños en EE. UU. diagnosticados, en comparación con 1 de cada 150 en el año 2000. A nivel mundial, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que el autismo afecta a aproximadamente 1 de cada 100 niños. La prevalencia es 4.2 veces mayor en niños que en niñas, en parte porque las niñas a menudo son mejores para enmascarar los síntomas. Históricamente, el diagnóstico era más común entre los niños blancos, pero el acceso mejorado a los servicios ha equilibrado las tasas entre diferentes grupos raciales y étnicos.
Prevalencia por raza y etnia
- Desglose de los CDC por grupo demográfico:
- Asiático/isleño del Pacífico:3,34% (o 33,4 por cada 1.000 niños)
- hispano: 3.16%
- Negro: 2.93%
- Blanco: 2.43%
Diagnóstico, Gravedad y Condiciones Asociadas
La edad promedio de diagnóstico en EE. UU. es de 4 años, aunque la Academia Estadounidense de Pediatría (AAP) recomienda la detección a los 18 y 24 meses. Se estima que el 26.7% de los niños con autismo tienen un autismo “profundo” que requiere apoyo intensivo. El autismo a menudo coexiste con otras condiciones como epilepsia (hasta en el 30% de los casos) y problemas de salud mental como la ansiedad y el TDAH. Es importante destacar que los niños con autismo tienen un riesgo 40 veces mayor de muerte por lesiones, siendo el ahogamiento la principal causa.
Tratamientos y Apoyo
El Análisis de Conducta Aplicada (ABA) es una de las terapias más comunes y efectivas para el autismo, enfocada en mejorar las habilidades sociales, de comunicación y en reducir los comportamientos desafiantes. Otras terapias importantes incluyen:
- Terapia del habla: Para mejorar la comunicación.
- Terapia ocupacional: Para desarrollar habilidades para la vida diaria.
- Entrenamiento en habilidades sociales: Para mejorar las interacciones interpersonales.
- Terapia asistida por animales: Para reducir la ansiedad.
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